“Solamente con fanáticos triunfan los ideales, con fanáticos que piensen y tengan la valentía de hablar en cualquier momento y en cualquier circunstancia que se presente, porque el ideal vale más que la vida, y mientras no se ha dado todo por un ideal, no se ha dado nada. Y todo es la vida misma.
¡Los tibios, los acomodaticios, los “buenos” justicialistas (para los enemigos del peronismo…) no serán quienes deban escribir la historia de nuestra Patria y de nuestro Movimiento, ni dirigir los destinos de nuestro Pueblo! Porque “el peronismo” no se aprende ni se proclama. Se comprende y se siente. Por eso es convicción y es fe… Yo no deseo, no quiero para el peronismo, a ciudadanos sin mística revolucionaria”.
Eva Perón, 17 de octubre de 1949.
No hay comentarios:
Publicar un comentario